
Mientras en México los políticos pelean en materia de justicia, y se hacen «amigos» de los criminales, en Estados Unidos Donald Trump, anunció que pedirá la PENA DE MUERTE para aquellos inmigrantes que asesinen a estadounidenses o agentes de la Ley.
En su discurso de la victoria, el presidente electo de Estados Unidos, aseguró que tendrá mano dura contra la inmigración ilegal.