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Aquella noche 7 miembros de una familia perdieron la vida al caer del puente del Mezquite al río, el cual no contaba con señalamientos
OJINAGA.-El próximo 27 de noviembre, serán ya 14 años de la terrible tragedia ocurrida en la comunidad de El Mezquite , cuando un par de familias viajaban desde los Estados Unidos a la comunidad de El Mezquite de este municipio, para pasar al lado de su familia «El Día de Gracias».
La trágica muerte de 7 miembros de una sola familia ocurrió cuando, su vehículo cayó de un puente, el cual aún estaba bajo reparación, pues había sido derrumbado una parte, gracias a la inundación ocurrida en ese año y las autoridades correspondientes no habían puesto la señalización correcta ni debida para evitar el paso de cualquier tipo de vehículo.
Fue una fría y oscura noche del año 2008, cuando la Suburban con 8 pasajeros se desplomó hacia el vacío, terminando en las inmediaciones del río Conchos, dando como resultado que la camioneta cayera de manera anormal, (llantas hacia arriba), ocasionando la muerte a 7 personas, 3 adultos y 4 niños, los cuales no pudieron salir de la Suburban y fallecieron ahogados.
Solamente la señora Adriana Chagoya una persona de la tercera edad, logro salir con vida de este accidente, la cual en su momento señaló que «jamás pensó en enterrar a su hija y a sus nietos y menos en una situación como esta».
Las personas fallecidas en este lamentable accidente fueron; Carlos Rey Madrid de 39 años, su esposa Olga de 27; Margarita Madrid González de 52, Kaylinn Ortíz y Danny Rey de 7, David López Hernández de 5 y Gael Rey de 2 años de edad.
El puente estaba inconcluso y no había señalamientos. »Los vimos caer y nos enfrenamos, y bajamos a ayudarlos pero ya habían muerto», señaló en aquel entonces Ubaldo Ortíz Muñoz, conductor de la camioneta que viajaba atrás de la familia Madrid.
Esta noticia dió la vuelta al mundo por lo aparatoso de la misma y por el fallecimiento de 7 miembros de una misma familia, pero también porque en su momento, ninguna de las autoridades se hicieron responsables del accidente, ni gobierno municipal ni gobierno del estado, pasaron varios años y el caso continuo «durmiendo el sueño de los justos».